Cuando diseñamos una instalación fotovoltaica de autoconsumo, es fundamental conocer el consumo al que va a estar asociada, para dimensionarla adecuadamente.
A veces escuchamos que el tamaño de una instalación para autoconsumo se puede estimar a partir de la potencia contratada, como un porcentaje de ésta. Evidentemente, de alguna forma, la energía consumida depende de la potencia contratada, pero en mucho menor medida que de otros factores, como el uso que hagamos de los electrodomésticos, la iluminación,…
Un ejemplo claro es el de las residencias de fin de semana. Pueden necesitar una potencia contratada elevada, pero casi no consumirán electricidad durante cinco días a la semana, haciendo que la energía mensual de la factura sea relativamente baja. Si se dimensiona la instalación fotovoltaica en función de la potencia contratada, gran parte de la energía generada se regalará a la Compañía eléctrica. Veamos por qué.
En un autoconsumo conectado a red, con excedentes y acogido a compensación simplificada, que es el habitual en instalaciones domésticas, se aprovecha la energía generada por los paneles fotovoltaicos de dos formas:
- Si cuando los paneles solares están generando energía, el consumidor la está demandando, ésta pasará directamente de paneles a usuario, y esos kWh le saldrán gratis
- Si no hay consumo suficiente para absorber todo lo generado en ese instante, la energía que “sobra” (excedentes), pasará a la red eléctrica y se contabilizará en el contador del cliente. Al final de cada mes, se pagará esa energía traspasada a la red, pero no al precio normal de la electricidad, sino a un precio menor. De esta forma, se reducirá la parte de “Energía” de la factura, que como poco podrá llegar a hacerse nula (nunca nos devolverán dinero en una factura)
Es decir, que si consumimos electricidad cuando hay sol, nos ahorraremos más dinero que si lo hacemos cuando no lo hay. Y hay un límite de excedentes que nos recompensan; a partir de él, la energía que entregamos a la red se la queda gratis la compañía eléctrica.
Por eso es importante dimensionar bien la instalación fotovoltaica. Si es excesivamente grande, parte de su generación no ahorrará en la factura, y no contribuirá a su amortización, haciendo que el periodo de recuperación de la inversión se alargue.
Además, pero esto es más difícil, conviene realizar los consumos en las horas de más irradiación, y si es posible, no simultáneamente, para no sobrepasar la potencia de la instalación fotovoltaica.
Lo ideal para dimensionar una instalación fotovoltaica correctamente es contar con los datos de consumo horarios durante un año (se pueden descargar de la página web de la Compañía distribuidora fácilmente). Con un programa informático especializado, se podrá estimar con gran precisión los ahorros que se pueden esperar de la instalación.
Trevinca gestiona esta información y redacta los estudios más detallados para que tu instalación esté totalmente adaptada a tu consumo.